Algunas cosas del Crossfit todo sobre ese deporte y como iniciarte

La gente habla de Crossfit en el trabajo, en el gimnasio o bien con los amigos, y son cada vez más los compañeros que se apuntan a las clases. Les ganan, pero sorprendentemente se repiten. Se habla del CrossFit, el último ejercicio deportivo que nos hace sudar y sufrir, mas que promete una agradable recompensa: adelgaza, reafirma, pone en movimiento todo el cuerpo y, además, está de tendencia.
En sentido riguroso, el CrossFit es una mezcla de entrenamiento de cardio, fuerza y resistencia. Combina diferentes disciplinas, desde la halterofilia hasta el atletismo, alternadas de forma continua a una determinada intensidad, soportada al máximo por el practicante. El objetivo es realizar un adiestramiento (WOD, abreviatura de Workout of the Day) que nos permita desarrollar todo nuestro potencial. El ejercicio regular, controlado y significativo nos hace más fuertes y flexibles, robustece el corazón, aumenta la fuerza, la velocidad y el equilibrio, en suma, nos hace más sanos. También es esencial cambiar las rutinas de ejercicio para que los atletas de larga duración no se aburran y obtengan los mejores resultados posibles. Puedes emplear máquinas (aunque la mayoría de los ortodoxos las rechazan a favor del movimiento funcional, es decir, de la utilización del cuerpo) y usar siempre ayudas como pesas, balones medicinales o zapas.
Ya antes de entrar en el box (la sala donde se marcha a ejercitar), debe valorar su estado físico con el instructor, ya que los ejercicios se amoldan al nivel de cada persona. Esto es muy importante, por el hecho de que aunque el deporte no es peligroso en sí (menos todavía si se calienta bien, se estira y se prosiguen las instrucciones del adiestrador), implica movimientos cuya técnica hay que controlar. Además de adaptar la rutina a nuestro cuerpo, no debemos intentar imitar a un compañero que ha trabajado duro a lo largo de 3 años. O nuestro cuñado.
¿De qué manera comenzar?
Teniendo presente esto, es importante saber que no es un deporte en el que haya que practicar todos los días, sino que es importante mejorar gradualmente y delimitar, así como el adiestrador, los días de reposo adecuados. Tres días por semana, sin adiestrar a lo largo de un par de días seguidos, es suficiente para empezar. De esta manera mejorarás tu forma física, aprenderás los movimientos básicos del CrossFit (sentadillas, flexiones, deadlifts... la terminología es bien interesante) y esto es muy importante, vas a poder escalar los movimientos y ejercicios conforme lo que tu cuerpo te deje hacer. Después de unos tres meses (si somos muy incesantes y ágiles) podemos llamarnos crossfiters junior.
En general, el adiestramiento de CrossFit se divide en cuatro partes. El calentamiento es la base para evitar lesiones y problemas. La primera una parte del entrenamiento es un calentamiento general que te prepara física y mentalmente para el adiestramiento del día. Empieza con un calentamiento general para preparar el cuerpo para un trabajo más intenso, y después pasa a un calentamiento concreto para los ejercicios del día. A continuación suele haber una sección de fuerza, sobre todo en los equipos avanzados, puesto que los principiantes acostumbran a aprender algunos de los movimientos y posiciones (habilidades) de este deporte.
Durante el periodo de adiestramiento primordial, que dura hasta treinta minutos, se desarrollan los primordiales ejercicios y se amoldan a la persona. Es importante anotar todo en la pizarra, incluida la duración del ejercicio y el peso levantado, para poder supervisar nuestro progreso. Finalmente, llegamos a los ejercicios básicos de estiramiento.
Foro de Crossfit en auge también requiere que los practicantes cuiden su dieta, y los hidratos de carbono son fundamentales. Este desarrollo explosivo ha provocado la proliferación de weblogs y cajas que ofrecen dietas y recomendaciones, no siempre y en todo momento respaldadas por verdaderos expertos. Según ella, una de las reglas de oro es eludir el consumo de azúcar blanco y saber que este deporte nos fuerza a vigilar lo que comemos y a proseguir una dieta de cinco comidas diarias, con los hidratos de carbono como ingrediente primordial.